Vender sus joyas y obtener el máximo provecho de ellas

 Vender tus joyas: ¿triunfo o tragedia?

¿Qué es más divertido, hacerse un tratamiento de conducto, pagar sus impuestos o vender sus joyas? No hay muchas opciones, pero seguir es un poco de conocimiento que puede eliminar la frustración de vender sus joyas. Y responda las preguntas difíciles como: ¿Recibiré un precio justo por mis joyas? ¿O pagué demasiado?

Las dos áreas críticas de conocimiento para obtener el mejor precio por sus joyas son los factores que determinan el valor de las joyas de herencia y bisuteria las opciones para liquidarlas. ¿Significa esto que tienes que convertirte en gemólogo solo para vender tus joyas? No. Pero algunos deberes y tomar notas pueden significar un precio mucho más alto pagado por sus joyas. Comencemos con lo que determina el valor de las joyas de herencia.

Estate es un término general que se usa para describir propiedad anterior. Ese hecho es uno de los factores determinantes. Las joyas de segunda mano en general no son tan valiosas como las nuevas. Algunas personas nunca comprarán un conjunto de compromiso de propiedad anterior por razones supersticiosas. He tenido clientes que podrían haberse ahorrado cientos de dólares si hubieran comprado un anillo usado, pero se negaron.

La joyería es una industria impulsada por el estilo. Algunos estilos son clásicos y duran décadas, otros duran solo unos meses. La joyería estatal que está pasada de moda no puede exigir un precio superior. De hecho, algunos estilos están tan fuera de moda que el único valor de la joyería es su valor intrínseco. 

El otro extremo es que las joyas pueden ser antiguas. La joyería antigua es altamente coleccionable y puede requerir una opción especial para vender. Saber si sus joyas son viejas y pasadas de moda o una antigüedad puede significar la diferencia de cientos, si no miles de dólares.

La condición es un factor determinante importante del precio recibido por sus joyas. Las joyas dañadas y rotas muchas veces justifican los costos de restauración, pero la mayoría de las veces las joyas dañadas solo se valoran en su valor intrínseco. La reparación de joyas en muchos casos es contraria a la intuición. He visto joyas que han sido destrozadas de tal manera que el costo de la restauración es menor y fácilmente justificable. Por otro lado, lo que parecía ser un problema insignificante hizo que las joyas no se pudieran restaurar.